PULSO
SINDICAL Nº 304 DEL 11 AL 20 DE ENERO DE 2016
Sin duda que ha sido un momento duro la
muerte de esos 10 trabajadores en la Región de la Araucanía, sobretodo por la
displicencia con la que fue tomado por el movimiento sindical y social. Esto
debe llamar nuestra atención y nos invita a reflexionar.
No era común en los tiempos de buena
organización, que a la muerte de trabajadores se respondiera con silencio. No
solo se exigía una rápida y profunda investigación y se demandaban las sanciones
correspondientes. También, y si lo ameritaba, se realizaban movilizaciones,
además de apoyar judicial y humanamente a las familias.
Hoy por hoy queda todo entregado a lo que
hagan los burócratas del parlamento y del gobierno, y prontito a otra cosa
mariposa.
Hemos sostenido invariablemente que estos y
otros hechos luctuosos en los que los protagonistas son los trabajadores están
profundamente relacionados con la crisis que vive la organización, con eso que gustan
en llamar “el cambio de paradigma”, ya que en vez de buscar soluciones y dar
directrices, el movimiento sindical organizado - o al menos gran parte de él -
se queda sin reacción y a merced de lo que hagan o puedan hacer quienes se
dicen representarlos en las esferas de poder.
Seguir esperando que los manzanos den
naranjas es, no solo inoficioso, un profundo error. Es clara la historia en
ejemplos al demostrarnos que el único movimiento que genera resultados, es
aquel que activa y exige respuestas organizadamente en la calle y en cualquier
otro escenario que se presente. No podemos seguir esperando de otros, tenemos
que actuar nosotros, con fuerza y decisión.
Las reformas laborales en discusión, son el
mas claro ejemplo de lo que aquí sostenemos. La muerte de trabajadores ante la falta
de elementos mínimos que los protejan, no terminarán con declaraciones
reconociendo carencias y anunciando cambios. Por el contrario, seguirán
produciéndose ya que no hay en la ley sanciones ejemplarizadoras a los malos
patrones, que los obliguen a respetar lo poco y nada que existe.
Y por si fuera poco, cuando existen las
leyes el infractor dispone de tantos resquicios que al final del pleito todo
queda en nada. Lo sucedido en Los Sauces da clara cuenta de lo anterior. La o
las empresas a las que estaban vinculados los fallecidos. tienen un historial de incumplimientos y sin embargo
siguieron operando como si nada.
Respecto de las reformas:
1.- Se hizo todo un trabajo de
comunicaciones desde el gobierno y los partidos que lo sostienen, para
trasmitir a la opinión pública que las reformas laborales apuntaban a mejorar
sustancialmente la situación de los trabajadores.
Esto fue complementado con la aceptación de
las mismas reformas por parte del único actor que el modelo reconoce como
representativo de los trabajadores, la CUT, quienes llegaron a decir - en una
frase que hasta el día de hoy deben lamentar - que estas reformas “ponían término
al Plan Laboral de la dictadura”.
La guinda de la torta para convencer a los
más reticentes, fue decir que eran tan buenas las reformas que hasta los
patrones estaban en contra de ellas.
¿Que tenemos en este año trascurrido desde
que se presentó el proyecto de reformas?
Un discurso gubernamental apoyado por el
sindicalismo obsecuente apuntando a
instalar en las mentes trabajadoras la idea que estas reformas van en la
dirección correcta al mejorar la organización y el poder de negociación,
discurso que es anulado por antecedentes indesmentibles.
Actualmente en mas del 90% de las empresas
chilenas es difícil o simplemente imposible organizarse y negociar.
A esto se debe agregar la opinión de algunos
senadores de la Nueva Mayoría y varios diputados, convencidos de que hay que
dar garantías especiales a la PYMES, cuando es precisamente en este sector
donde se presentan los mayores problemas, en cuanto abuso y persecución a
quienes buscan organizarse.
Estos antecedentes, que pusimos como
organización sindical en la discusión desde la aparición del proyecto de ley, y
que muchos han calificado de catastrofista son ratificados por la ENCLA 2014 que
entrega la Dirección del Trabajo, y que dan cuenta que en el 86% de las
empresas nunca ha habido sindicato
2.- Las principales ideas - fuerza del
proyecto de ley, se anulan durante la discusión.
a) No
habrá mas y mejores condiciones para la negociación colectiva, toda vez
que todos aquellos sindicatos que negociaron y que volverán a hacerlo post –
reformas, deberán hacer frente no solo a la permanente campaña del empleador
por destruir la organización sindical y que implica perdida de socios por campañas
antisindicales que nadie sanciona, sino que también deberán contar con los
quórum mínimos exigidos para la constitución de un sindicato, de otra manera
estarán IMPEDIDOS de negociar colectivamente en forma reglada (Articulo 328
del proyecto de reformas laborales).
La cuestión podría ponerse aún mas grave
para la organización sindical, de prosperar una indicación del Senado que,
aunque ratifica el principio de que los trabajadores se mantendrán afectos a la
negociación colectiva una vez hecha la presentación del proyecto, podrán dejar
de estarlo si es que renuncian al sindicato para lo cual solo deben enviar una
carta certificada a la directiva sindical, con copia a la Inspección y a la
empresa, lo que hasta ahora no estaba permitido (articulo 324 del proyecto
de reforma)
b)No
se instala “el piso” como un elemento efectivo de la negociación entre partes, toda vez que la reforma mantiene los principios vigentes, esto es
negar a los trabajadores la posibilidad de mantener lo acordado con la empresa
en la anterior negociación colectiva (articulo338 del proyecto).
c) No
es totalmente cierto que solo la afiliación sindical permitirá acceder a los
beneficios del instrumento colectivo suscrito entre empresa y sindicato,
ya que una indicación incorporada en el Senado dice que, si la empresa
incorpora en su respuesta al proyecto presentado por los trabajadores las
cláusulas pactadas de reajuste de
remuneraciones según IPC, podrá aplicarla a todos sean o no parte del contrato colectivo, sin
que se debe pagar extensión de beneficios por esto.
Hasta ahora la sola extensión de este
reajuste daba lugar a reclamar por “extensión de beneficios” (articulo 323 de
proyecto de reformas).
Para nadie es un secreto que la presión
patronal puede frenar la afiliación post – negociación, ofreciendo este
reajuste y otro tipo de compensaciones a condición de que nadie entre al
sindicato, sin obviar por cierto el temor hasta hora existente de los
trabajadores a ser parte de la
organización Y no debemos perder de vista que sigue vigente la
posibilidad de constitución de sindicatos pro – empresa.
Estas son solo algunas joyitas de la
reforma, en el próximo Pulso veremos otras. Nadie podrá decir que no sabía lo
que tramaron los detentadores del poder, nadie podrá alegar ignorancia. Solo
queda ponerse a trabajar para anular con gestión sindical una mala ley.
* Nota: En el próximo Pulso, continuamos revisando algunas propuestas de reformas.
MANUEL AHUMADA LILLO
Presidente C.G.T. CHILE